Todo aquello que nos va sucediendo, aunque a veces no lo creamos, sucede por alguna razón. Si es bueno, no es necesario reflexionar demasiado en por qué pasó. Si es malo, no te preocupes. El lado bueno, sigue estando ahí, sólo que de forma más tímida. Perder un empleo, perder un ser querido, recibir un cuento, una sonrisa. Lo más importante es aceptar los hechos. Somos como un rio, en constante fluidez. Movimiento. Corriente. Constancia. Ritmo. Fuerza. Belleza. Si contemplas desde la orilla, el transcurso del río, y al día siguiente vuelves al mismo lugar, para contemplarlo de nuevo. ¿Es el mismo? Gracias Heráclito. No creo no, así que saca tus conclusiones! Los seres humanos-río.
No hace falta ser un cangrejo de río y caminar hacia atrás... Mejor comportarse como las tortugas, de forma tranquila y sabia, intuyendo el momento idóneo para esconderse en el duro caparazón. Hay tortugas de rio, no? :) El caparazón recomforta, pero mejor usarlo cuando realmente sea neceria, que sinó, se malgasta.
Si pienso en mi vida nómada... todo ha sido como vivir en una corriente constante.
Los 17 años (2000) los cumplí en Irlanda, viví allí un mes.
Los 19 años (2002) en Escocia, otro mes.
Los 20 años (2003) de ruta mochilera de Interrail (Alemania, Suiza, Austria y Dinamarca).
En el 2005 otro interrail por Luxemburgo, Francia y Holanda.
En el periodo de 2005 a 2006 viví 10 meses en Jena (Alemania) viajando un mes por Polonia (mit Nina!)
2007 un mes por Croacia, gran viaje con el Micra.
Y ese mismo año 10 meses viviendo en Frankfurt am Main.
2009 dos meses tropicales en Cuba.
2010 un mes en la exageradamente bella Grecia.
2010 - 2011 trece meses en Berlin.
2012 Thailand, Indonesia, Singapour, Malasia.
2013 Australis.
No sé si uno de las posibles consecuencias del comunismo alemán ha provocado en mi -indirectamente- esta necesidad de viajar. En el 2005 tuve una conversación que se quedo en mi retina mental para siempre. En resumen, alguien que había nacido en la antigua DDR me explicaba todos los viajes que hizo y no iba a parar de hacer desde que abrieron las fronteras. Yo pensé, "es verdad, somos libres, la vida no es esa estructura que nos implantan, el mundo es muy grande".
Lo único es que la estructura es tan deliciosamente sólida que nos atrapa con fuerza.
Quién bien me conoce sabe que llevo más de siete años con la idea de llegar a Asia, o bien con el Transiberiano o después de trabajar un tiempo en los campos australianos. Ahora sé que mi llegada no va a ser tan espectacular, cogeré un simple avión a Bangkok y ciao. (He vuelto, y puedo corroborar que mi llegada sí que fue espectacular, sin maletas, y las targetas de crédito tragadas por el cajero). He intentado arrastrar a amigos y parejas, podría decir que a cualquiera que se me ponía delante para convencerle de que me hiciera de acompañante...
Calderón vino un día y después de decirme, que los sueños sueños son, me susurró en el oido que "y, hey! son solo tuyos!".
El río. Sí la vida fluye, y te lo pone todo en bandeja para que los sueños se puedan ir cumpliendo. Solo hay que estar atento, tener los ojos bien abiertos, y sentir cuando llega el momento idóneo. Deja el miedo que no cabe en los bolsillos. Es tu sueño viajar? Adelante! Pero no te dejes minimizar, el mundo de los sueños es infinito... navegar por el ancho mar, aprende un idioma, lee, toca un instrumento, apúntate a un curso de circo... Escúchate. Busca la fuerza y sigue tu intuición, que por experiencia sé que nunca falla!
No hace falta ser un cangrejo de río y caminar hacia atrás... Mejor comportarse como las tortugas, de forma tranquila y sabia, intuyendo el momento idóneo para esconderse en el duro caparazón. Hay tortugas de rio, no? :) El caparazón recomforta, pero mejor usarlo cuando realmente sea neceria, que sinó, se malgasta.
Si pienso en mi vida nómada... todo ha sido como vivir en una corriente constante.
Los 17 años (2000) los cumplí en Irlanda, viví allí un mes.
Los 19 años (2002) en Escocia, otro mes.
Los 20 años (2003) de ruta mochilera de Interrail (Alemania, Suiza, Austria y Dinamarca).
En el 2005 otro interrail por Luxemburgo, Francia y Holanda.
En el periodo de 2005 a 2006 viví 10 meses en Jena (Alemania) viajando un mes por Polonia (mit Nina!)
2007 un mes por Croacia, gran viaje con el Micra.
Y ese mismo año 10 meses viviendo en Frankfurt am Main.
2009 dos meses tropicales en Cuba.
2010 un mes en la exageradamente bella Grecia.
2010 - 2011 trece meses en Berlin.
2012 Thailand, Indonesia, Singapour, Malasia.
2013 Australis.
No sé si uno de las posibles consecuencias del comunismo alemán ha provocado en mi -indirectamente- esta necesidad de viajar. En el 2005 tuve una conversación que se quedo en mi retina mental para siempre. En resumen, alguien que había nacido en la antigua DDR me explicaba todos los viajes que hizo y no iba a parar de hacer desde que abrieron las fronteras. Yo pensé, "es verdad, somos libres, la vida no es esa estructura que nos implantan, el mundo es muy grande".
Lo único es que la estructura es tan deliciosamente sólida que nos atrapa con fuerza.
Quién bien me conoce sabe que llevo más de siete años con la idea de llegar a Asia, o bien con el Transiberiano o después de trabajar un tiempo en los campos australianos. Ahora sé que mi llegada no va a ser tan espectacular, cogeré un simple avión a Bangkok y ciao. (He vuelto, y puedo corroborar que mi llegada sí que fue espectacular, sin maletas, y las targetas de crédito tragadas por el cajero). He intentado arrastrar a amigos y parejas, podría decir que a cualquiera que se me ponía delante para convencerle de que me hiciera de acompañante...
Calderón vino un día y después de decirme, que los sueños sueños son, me susurró en el oido que "y, hey! son solo tuyos!".
El río. Sí la vida fluye, y te lo pone todo en bandeja para que los sueños se puedan ir cumpliendo. Solo hay que estar atento, tener los ojos bien abiertos, y sentir cuando llega el momento idóneo. Deja el miedo que no cabe en los bolsillos. Es tu sueño viajar? Adelante! Pero no te dejes minimizar, el mundo de los sueños es infinito... navegar por el ancho mar, aprende un idioma, lee, toca un instrumento, apúntate a un curso de circo... Escúchate. Busca la fuerza y sigue tu intuición, que por experiencia sé que nunca falla!